OPINIÓN | Luisina Daives, psicóloga de Amadem
El Día Internacional del Orgullo LGBT, también conocido como Día Internacional del Orgullo, es un día que se celebra mundialmente cada 28 de junio en conmemoración de los disturbios de Stonewall de 1969 (una serie de manifestaciones espontáneas y violentas contra una redada policial que tuvo lugar en la madrugada del 28 de junio de 1969 contra personas del colectivo) este día, se realiza para reafirmar el sentimiento de orgullo sobre las orientaciones sexuales e identidades de género tradicionalmente marginadas y reprimidas, y para visibilizar su presencia en la sociedad y sus reclamos.
El prejuicio sexual está socialmente enraizado y se traduce en situaciones de discriminación, e incluso violencia, hacia el colectivo LGTBIQ+. Por otra parte, está demostrado que sufrir situaciones de discriminación, acoso o violencia es un factor de riesgo para tener una mala salud mental.
En relación a esto algunas cifras: un 61% de las personas LGTBI+ considera que los discursos de odio han empeorado y un 63% opina en la misma dirección respecto a la violencia hacia personas LGTBI+. El grupo de edad que manifiesta haber sufrido acoso con mayor porcentaje es el de los 25 a los 34 años con el 38,7%, seguido de 18 a 24 años con el 32,4% y el de 35 a 44 años con el 30,1%. Un 35,7% de las personas de 18 a 24 años confirma haber tenido discriminación en los últimos cinco años, seguidas de un 32,5% de las personas entre 25 a 34 años.
Estamos hablando de un porcentaje alto, para ser atacad@s por su elección sexual o de género. Cada persona sin dañar a otras, deberíamos poder vivir libremente, teniendo acceso a las mismas oportunidades, y más si a un aspecto tan íntimo se refiere. En esta línea, las personas LGTB reportan más del doble de intentos o ideaciones de suicidio (32,1% vs. 14,5%), así como de autolesiones (19,5% vs. 9%). Al final las personas sienten o el mensaje que reciben es que cómo soy o cómo quiero vivir, está mal, soy rar@ o enferm@ por esto. Es muy necesario que tomemos conciencia como sociedad, y desde el lugar de cada persona, vivamos respetando otras elecciones.
¡La arrogancia y el orgullo preceden a la caída!