Gata está en el noreste de la comarca de la Marina Alta, en una llanura a los pies de la cara sur del Montgó. Su término municipal tiene aproximadamente 20 kilómetros cuadrados y limita con Pedreguer, Dénia, Teulada-Moraira, Benissa, Senija y Llíber. Los habitantes de Gata eran, según el padrón de 2019, 6049 personas.
El municipio está marcado por el curso del río Gorgos. A final de la década de los 30 del siglo XX, después de construir el puente de les Alcolaies, la población empezó a extenderse también por el otro lado del río.
El nacimiento de Gata se remonta a la época islámica, alrededor del año 1023, cuando Gata era una alquería musulmana ligada al rey de Dénia, Abu Muyahid. En el año 1075 vivían en Gata unos 300 habitantes, que se quedaron en alrededor de 60 por una epidemia de cólera. El rey de Dénia, para promover este asentamiento, instaló una escuela de arte cerámico. La escuela se hizo tan popular que en 1180 Gata ya tenía unos 600 habitantes.
El auge del comercio llegó en el siglo XIX, con la pasa, elaborada a partir del cultivo de uva moscatel. En ese momento se construyeron muchos riuraus en el término municipal. Aún así, a mitad del mismo siglo se produjo una gran emigración de gateros, especialmente hacia América. Estos años también están en auge los productos elaborados artesanalmente con mimbre.
