El Ayuntamiento de Pego aprobó, ayer, en sesión plenaria, las bases para licitar el proyecto del ‘Pego Golf’ con los votos a favor del equipo de gobierno (PSPV y Ciudadanos Pego) y los de los grupos de la oposición PP y Ciudadanos. Mientras que Compromís votó en contra.
Estos últimos fueron ayer los más críticos en el debate plenario respecto a este punto. En su exposición, hecha ya pública antes de la sesión plenaria, apuntaron la existencia “de inconsistencias en las bases de programación para la adjudicación indirecta del programa de actuación integrada ‘Pego Golf’”. Una de ellas, argumentaron, fue la de que en el documento “no citan en ningún momento la caducidad de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) ni se hace referencia a las consecuencias de ésta según la LOTUP, ni la Ley de Evaluación Ambiental estatal”.
Desde Compromís apuntaron también que la Conselleria de Medio Ambiente “respondió ya que la DIA no producía efectos jurídicos y había perdido su vigencia sin necesidad de formular ninguna resolución expresa de caducidad”.
Por otra parte, el grupo Compromís insistió en que “no existe en el expediente justificación documental de que se haya comunicado la situación a todas las personas propietarias de los terrenos dentro del ámbito del proyecto para hacerse cargo o no de la gestión de ésta”.
Frente a estas afirmaciones desde el equipo de gobierno, a través de la concejal de Urbanismo, Laura Castellà, se aseguró que no se ha dado la citada caducidad del proyecto, “el Ayuntamiento ha recibido un informe ratificado por técnicos de la conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, donde se indica que la DIA tiene vigencia indefinida, porque se trata de un plan parcial y estos, cuando son aprobados, tienen vigencia indefinida”. Según Castellà, “lo que va a hacerse es la cancelación del agente urbanizador, para buscar otro, no quiere decir que se cancele el proyecto”.
La concejal de Urbanismo también remarcó que la respuesta sobre la vigencia de la DIA “por parte de la conselleria de Medio Ambiente a una pregunta de un diputado pegolino, no cuenta con ningún informe de técnicos que avale la respuesta de la ya exconsellera Mireia Mollà; o al menos el Ayuntamiento no ha recibido ningún informe, como si ha llegado el de la conselleria de Urbanismo, que también contestaba a una pregunta de Compromís”.
En cuanto a la “no comunicación” a los propietarios afectados, Castellà aseguró que el consistorio “se ha reunido con la asociación constituida ‘Afectados por el campo de golf’, así como con los grandes propietarios”. La concejal explicó que “hasta ahora no se ha recibido ninguna propuesta por su parte para hacerse cargo de la gestión. Además, este Ayuntamiento se ha asegurado, con las bases de la licitación, que los propietarios cobren un precio justo por la venta de las propiedades”.
Por su parte, el alcalde, Enrique Moll, matizó que el Ayuntamiento “seguirá el procedimiento que procede, dar marcha atrás supondría que los propietarios que han llegado a comprar 600 hanegadas a 40.000 euros, le reclamarían al consistorio el lucro cesante, y son muchos millones, significaría embargar al pueblo”.
La postura del equipo de gobierno estuvo secundada por los grupos de la oposición PP y Ciudadanos (Cs). El concejal de Cs, Simón Ortolá, apuntó que el proyecto “aportará beneficios al municipio. Es un proyecto que se puede compatibilizar con el respeto a la agricultura”. Por su parte, los populares, a través de Ferran Gonzàlez, también remarcó “los beneficios que reportará a los pegolinos y propietarios”, Aún así, el portavoz popular criticó que la iniciativa “llega demasiado tarde”.
Nombre para la nueva biblioteca
Otro de los puntos que se debatió en el pleno fue, de nuevo, el nombramiento del nuevo edificio que alojará la biblioteca pública. El Partido Popular presentó una moción para que, además de las opciones que ahora se pueden escoger a través de una votación popular: ‘Carmel Giner’ y ‘Carmen Alemany Bay’; se pueda añadir el de Cervantes, “el nombre que siempre ha tenido el edificio”, argumentó el concejal popular.
Por su parte, Compromís también presentó una enmienda a la moción del PP, en la que solicitaba que se realizara una aportación de nombres por parte de los vecinos y vecinas del pueblo y que después se pudiese votar entre ellos, siempre que fueran nombres de pegolinos y pegolinas. Enmienda que en Partido Popular rechazó.
Finalmente la moción presentada por el PP tampoco contó con el apoyo necesario para seguir adelante con la propuesta.
