A solo 10 días del 25 de noviembre, Día Internacional contra la Violencia de Género, los socialistas calpinos han querido aportar su granito de arena a las reivindicaciones que tienen lugar en toda la geografía española presentando para la ocasión una moción con la que el municipio de Calp se sumaría a una iniciativa que ha tenido una repercusión positiva en varios municipios en toda España.
Se trata de la colocación de señales de tráfico, «creativas», en la entrada del municipio, como han hecho otros municipios, mostrando así la repulsa a la Violencia de Género y sumándose a la igualdad.
Esta moción, según indican los socialistas, ha contado con la negativa de la alcaldesa, Ana Sala, "que la calificado la moción de irrespetuosa y ordena votar en contra sin ni siquiera leerla", indican los ediles del PSOE.
La propuesta nace, según manifiesta el PSOE, de la intención de tener un hito institucional que refuerce una postura municipal contra la violencia de género. "El municipio de Calp hasta ahora nunca ha sido ajeno a la problemática y se ha sumado activamente a las reivindicaciones públicas en fechas señaladas o ante los demasiados casos de violencia que hemos tenido que lamentar anualmente. La colocación de estas señales en la entrada del municipio habrían servido como un mensaje permanente hacia la multitud de personas que Calp acoge durante el año".
Bajo el lema “Calp contra la violencia machista”, se pretendía emitir un mensaje con triple objetivo. Los socialistas explican que "por un lado, apoyar e impulsar la igualdad entre hombre y mujeres, y recordar así a todas aquellas que no están, por haber sido víctimas de la violencia machista. Por otro, erradicar la citada violencia, y por último, mostrar un compromiso municipal unánime, público y permanente hasta que la causa esté erradicada".
Desde el PSOE lamentan que por una parte la alcaldesa haga llamamientos a los grupos políticos para que aporten su «granito de arena» a la gestión municipal pero, por otra lado, se niegue ni siquiera a debatir el contenido de una propuesta que, no solo ha sido implantada por múltiples municipios, incluyendo a los gobernados por su partido, sino que cuenta con el apoyo económico de la Diputación de Alicante.
