El apagón eléctrico masivo que afectó ayer al territorio español puso a prueba la capacidad de respuesta del sistema sanitario. A pesar de la magnitud del corte, que duro hasta 11 horas en la comarca de la Marina Alta, centros de salud y el Hospital de Dénia activaron sus protocolos de emergencia y mantuvieron operativas las áreas de atención urgente a través del uso de grupos electrógenos.
En el Departamento de Salud de Dénia, los servicios sanitarios actuaron con rapidez para garantizar la seguridad de los pacientes. «Mantenemos la actividad urgente con grupos electrógenos y hemos desprogramado todas las citas de Consultas Externas y Cirugías no Urgentes. La atención urgente está asegurada en todo momento», informaron fuentes sanitarias.
A nivel general, los hospitales de la red pública activaron sus generadores eléctricos y, salvo algunas incidencias en los servicios de radiología, la actividad en urgencias continuaba con normalidad. No obstante, la actividad quirúrgica programada para la tarde de ayer fue suspendida en todos los centros donde estaba prevista, como medida de precaución.
Uno de los colectivos más vulnerables durante este tipo de situaciones fue el de los pacientes que dependen de oxigenoterapia domiciliaria. Desde el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU), se gestionó el traslado de estos pacientes a centros de salud (Puntos de Atención Continuada – PAC) para garantizar su estabilidad.
El Ministerio de Sanidad y los servicios de emergencias estuvieron monitorizando la situación hasta que se reestableció el suministro eléctrico.