OPINIÓN | Luisina Daives, Psicóloga de Amadem
La salud mental de las personas más jóvenes está en peligro si no hacemos cambios contundentes y firmes. La adolescencia es una etapa evolutiva cargada de incertidumbre, cambios, sentimientos confusos, carencias, etc. en donde van a necesitar guías, pautas, normas y acompañamientos, del mundo adulto. Actualmente, muchos son los estímulos y distractores que se presentan en el mundo de un adolescente y, si esta guía no es firme y segura, más probable será que el mundo adolescente tambalee.
El día 2 de marzo se ha elegido para sensibilizar y visibilizar la importancia de cuidar de la Salud Mental de los más jóvenes. Fundamentalmente hoy por hoy, donde las redes sociales, los consumos, la forma de relacionarse, la aceptación e integración del concepto de autoridad, el lenguaje, la música, la sexualidad, y podría la lista continuar, han cambiado tanto. Es importante que en casa respetemos horarios y momentos, que tengan una actividad variada y que haya espacios sin tecnologías. Eduquemos en valores como el respeto y la educación por medio de palabras mágicas como por favor, gracias o ¿cómo estás? Como personas adultas, tenemos que validar lo que sienten, piensan y hacen, aunque sus edades sean muy tempranas, necesitan saber qué les ocurre y por qué les ocurre eso. En ese reconocimiento de todo su mundo interno, estará la base sólida de una buena autoestima, de una seguridad personal y de un buen autoconcepto.
Aprovechando que esta semana se conmemoró el Día Mundial de las ONG, también me parece importante, que pensemos que hacer voluntariados, dentro de asociaciones, o ser socios de ellas, donar nuestro tiempo (que es lo más valioso que podemos tener las personas) y un poco de dinero, será un acto de empatía, valores y amor. Y esto puede ser ejemplo para nuestras personas más jóvenes si empezamos por casa. Es un acto muy bonito, donde se aprende lo más valioso para la vida que es: ser humanos. Las organizaciones sin animo de lucro, trabajamos por la equidad e igualdad, para todas las personas, ya que esto no existe en un mundo capitalista, como en el que vivimos. Por esto sin la ayuda, conciencia y solidaridad de todas las personas, será muy difícil llegar a nuestros objetivos y por ende a ayudar a tantas familias que lo necesitan.
