El director general de Costas, Puertos y Aeropuertos, Marc García Manzana, ha anunciado que la primera fase de las obras de acondicionamiento del Puerto Blanco de Calp finalizará antes del inicio del verano. Esta actuación forma parte de un plan integral de modernización valorado en 9 millones de euros, cuyo objetivo es impulsar la náutica deportiva, fomentar el turismo y dinamizar la economía local.
Según ha explicado García Manzana, se trata de «una apuesta clara de la Generalitat y el concesionario por la náutica deportiva, el fomento del turismo y la creación de empleo, mediante un proyecto integral que permitirá al Puerto Blanco contar con unas instalaciones totalmente renovadas y adaptadas a las necesidades actuales».
La primera fase de las obras, que se inaugurará a mediados de junio, contempla la creación de 80 puntos de atraque para embarcaciones deportivas y 60 para motos acuáticas. Además, se han habilitado servicios como suministro de agua y electricidad, aseos y un chiringuito que dará servicio a los usuarios de la playa del puerto.
Para evitar molestias durante la temporada estival y favorecer la actividad turística, el director general ha indicado que las obras se reanudarán tras el verano, con el inicio de la segunda fase. Esta incluirá «la creación de cuatro locales de hostelería y una zona comercial con numerosos establecimientos», ha detallado.
Las actuaciones, iniciadas hace algo más de un año con una inversión total de 9.349.042 euros procedentes de la colaboración público-privada, han permitido consolidar el dique rompeolas en los muelles de Poniente y Levante Sur, construir un nuevo muelle, y ampliar las zonas de amarre, lo que ha mejorado la operatividad y la seguridad del puerto.
También se han renovado las zonas de Levante Norte y Carena, con trabajos de demolición, adecuación y urbanización. Se han instalado pantalanes flotantes, redes de suministro, iluminación, señalización y accesos adaptados, garantizando la accesibilidad universal. Asimismo, se ha incorporado una nueva estación de combustible y torretas de servicios con agua, electricidad e iluminación.
La intervención se ha completado con medidas de protección medioambiental, como la contención de laderas inestables y la integración paisajística, con el fin de preservar el entorno natural del puerto.
