Los vecinos de la urbanización Mirambons de Beniarbeig llevan semanas preocupados por la seguridad de sus casas. Una intranquilidad provocada por los últimos robos que se han producido en esta zona, llena de chalets y casas de campo, más alejada del casco urbano y, por tanto, un blanco fácil para los ladrones.
Los robos empezaron hace dos meses pero se han intensificado en las últimas semanas. Los ladrones entran en las viviendas mayoritariamente cuando los propietarios no se encuentran dentro. Aunque también ha habido casos en los que sí estaban dentro los propietarios, a quienes han dormido con gases. Algunos vecinos explican que incluso, antes de abandonar la vivienda, se han quedado a cenar. "En casa de un vecino rompieron la reja y entraron por un agujero muy pequeño, por ahí no entra alguien que pese más de 50 kilos", nos explica uno de los vecinos afectados por los robos.
Ante esta situación que no cesa, los vecinos de la urbanización empezaron a organizarse entre ellos y han creado un grupo de WhatsApp, en el que ya son más de 60 personas, para avisar cuando ven algún coche o persona extraño en la zona. Pero además, ayer mismo presentaron un escrito en el Ayuntamiento, a la atención del alcalde de Beniarbeig, para pedirle mayor presencia policial en la zona y un estudio de seguridad con la propuesta de instalar videocámaras en dos lugares estratégicos de la urbanización que permitiría controlar casi toda la zona.
Actualmente Beniarbeig, pese a tener un número elevado de policías locales en comparación con otros municipios con el mismo número de habitantes en la Marina Alta, no dispone de servicio nocturno de Policía Local y es precisamente por la noche y la madrugada cuando se están produciendo estos robos.
La Guardia Civil de El Verger es quien tiene las competencias en el municipio pero tampoco dispone de suficientes agentes para poder intensificar la vigilancia en la urbanización Mirambons, aunque los vecinos han podido confirmar a esta redacción que desde que ha empezado la ola de robos, han intensificado su presencia en la zona.
Los vecinos esperan que, tras presentar el escrito al consistorio, se empiecen a tomar medidas para dejar de vivir la intranquilidad que han sufrido este verano.
