El pasado 1 de diciembre se confirmaba que el agua que recibían las casas de Xaló, Parcent, Alcalalí y Llíber no era potable. Más de un mes después, el pasado 5 de enero, el Ayuntamiento de Xaló comunicó a sus vecinos que el agua volvía a ser apta para el consumo humano.
Tras ello, el consistorio ha querido explicar a sus vecinos el porqué de la situación. Uno de los impedimentos más grandes que se encontraron las autoridades fue «la actitud de la Comunidad de Regantes, que no consideró urgente resolver definitivamente la avería del pozo 2, puesto que no quería hacer frente el coste de la reparación a pesar de que incluso la Diputación de Alicante, que como agente mediador intervino, consideraba que era la Comunidad de Regantes a la que correspondía pagar los gastos».
Un accidente provoca la caída de la bomba
El consistorio explica cómo ocurrió todo: «El miércoles 24 de noviembre mientras se llevaban a cabo trabajos en el Pozo 2 de la Comunidad de Regantes de Parcent se produjo un grave accidente que provocó la caída de la bomba, tubería y cables eléctricos de alimentación en el fondo del pozo (a más de 300 metros de profundidad)». Así fue como el Pozo 2 quedó fuera de servicio.
Para solventar al momento el problema, la Comunidad de regantes tomó la decisión de poner en marcha otro pozo «que produce agua de menor calidad, por la presencia de aluminio y hierro que confieren al agua un aspecto turbio». Así, el consistorio afirma que ninguno de los Ayuntamientos afectados recibió aviso de este cambio.
Sin embargo, no saltaron las alarmas hasta el 29 de diciembre, tras agotar la autonomía de cuatro días de reserva de agua de los depósitos en Xaló. Ese día «se detecta que el agua de nuestra red presentaba turbidez, lo que motivó la solicitud a la Diputación para la toma de muestras extraordinarias de agua, obteniendo el miércoles 1 de diciembre los datos del laboratorio que indicaban la presencia de aluminio y hierro en valores ligeramente superiores a los permitidos». Los resultados de los análisis, por tanto, fueron comunicados a los vecinos y al Centro de Salud de Dénia para, acto seguido, poder aplicar «el protocolo remitido por Sanidad».
Este protocolo conlleva la toma de muestras de agua, el control diario de la turbidez, la purga de agua en depósitos y red y el aumento de la dosificación de cloro en el agua «por motivos de asegurar su desinfección». Tras ello, el Centro de Salud de Dénia realizó una visita de inspección a la zona.
¿Por qué la situación ha durado más de un mes?
El Ayuntamiento de Xaló apunta tres razones principales. En primer lugar, «la gravedad de la avería producida en el pozo 2, que motivó que se tuvieran que realizar unos trabajos de naturaleza muy extraordinaria». Estos finalizaron con éxito el día 13.
En segundo lugar, transmiten que no había otras soluciones «fiables y de calidad y cantidad». Por último, el consistorio insiste en la actuación de la Comunidad de regantes. Esta es la que «vende y cobra el agua en alta en los pueblos del Vall de Pop, ya unos de los precios más altos de la provincia de Alicante. Los ayuntamientos pagan con el precio de agua el mantenimiento de las instalaciones y éste no era el indicado», según explica el Ayuntamiento de Xaló.
Retirar la gestión del suministro a los regantes
Los Ayuntamiento afectados, junto al organismo de sanidad en la comarca y el Departamento de Ciclo Hídrico de la Diputación de Alicante trabajaron conjuntamente para acelerar los procesos. Sin embargo, «la negativa de los regantes a hacer frente a la reparación de la avería en su pozo» y las fechas festivas en diciembre y enero, «han producido momentos de tensión». Por este motivo, desde el Ayuntamiento de Xaló han querido explicar de forma oficial a través de su página web «todo lo que a lo largo de las semanas hemos estado tratando de resolver mediante reuniones».
Concretamente el consistorio de Xaló, trató este tema en el último pleno del año 2021 con la intención de «iniciar los trámites para que los cuatro pueblos del Vall de Pop pasen a gestionar el pozo que habitualmente nos suministra agua». De este modo, se independizarían de la gestión de la Comunidad de Regantes.
Fuentes alternativas de agua y gestión
El Ayuntamiento de Xaló busca alternativas para gestionar mejor el abastecimiento de agua potable. De este modo, mediante una subvención de la Diputación de Alicante, están llevando a cabo «un sondeo de investigación en la partida de Les Murtes para realizar una perforación de más de trescientos metros de profundidad en la que se pretende estudiar la viabilidad de realizar un nuevo pozo».
Si esta actuación tuviese éxito, el pozo de Les Murtes sería, en un futuro, «el origen de las aguas que nuestros vecinos tendrían a su alcance y, por tanto, dispondríamos de una alternativa real de suministro a los pozos de los regantes de Parcent».
Además, el consistorio afirma que también se cambiarán las tuberías para mejorar el rendimiento de la red. Este nuevo año 2022 se procederá a cambiar «las tuberías de la Plaza Mayor y de las calles Major, Alicante, San Judas y Ladislao. Además, se renovará la red del sector sur de La Solana».
Por último, el Ayuntamiento «sigue realizando pruebas de calidad del agua adicionales a las que exige la normativa», las cuales se pueden consultar mensualmente en tanto en la página web como en las redes sociales municipales. De esta forma termina la explicación de toda la problemática con las aguas en la Vall de Pop firmada por el concejal de Aguas Potables del Ayuntamiento de Xaló, Gerard Fullana i Martínez.
