La Guardia Civil ha detenido a cinco integrantes de una red criminal que se hacía pasar por revisores de la luz para poder acceder a las viviendas y robar en ellas. Los delincuentes actuaban en casas de personas mayores en las provincias de Alicante y Madrid. Por ahora, el Juzgado de Guardia de Dénia ha decretado la puesta en libertad de todos los miembros de la banda con la prohibición de salir del territorio nacional y teniéndose que presentar periódicamente en los Juzgados.
La detención se ha logrado después de llevar a cabo las investigaciones pertinentes, ya que se había detectado indicios de un incremento de robos y hurtos en el interior de viviendas en la localidad de Calp y en otros municipios cercanos durante el mes de julio. En todos los robos, el modus operandi utilizado era el mismo. En primer lugar, telefónicamente seleccionaban a sus víctimas, las cuales tenían todas una media de 80 años de edad. Después, con la promesa de abaratar sus facturas de la luz, concertaban una cita para acudir al domicilio de la víctima. Una vez en el domicilio, mientras uno de los miembros distraía a la persona, el resto de la banda desvalijaba la vivienda.
Si la víctima se daba cuenta del robo, los delincuentes no dudaban en utilizar la violencia física para lograr su fin. Del mismo modo, si los propietarios o residentes se ausentaban de las casas, estos accedían utilizando llaves falsas o herramientas similares como ganzúas.
Operación Garles
Con la finalidad de esclarecer los hechos denunciados y de dar con los responsables de la comisión de estos delitos, el Área de Investigación del Puesto Principal de Calp dio inicio a la operación Garles.
En una primera fase de las investigaciones, y tras un estudio exhaustivo de toda la documentación obtenida, los agentes intensificaron los controles en la localidad durante el horario que la banda elegía para cometer los delitos.
El 6 de septiembre, los agentes identificaron a los ocupantes de un vehículo, los cuales tenían antecedentes policiales por hechos similares a los investigados. Se trataba de un grupo criminal organizado e itinerante procedente de la localidad de Fuenlabrada (Madrid).
Los agentes acreditaron que la banda se componía de cinco varones, entre los 28 y 30 años de edad, responsables de más de una decena de delitos de robos y hurtos en viviendas en las localidades de Calp, Benissa, Teulada, Bussot, Villajoiosa, El Campello y Alcorcón (Madrid). Además, su centro de operaciones y residencia estaba fijado en una vivienda ocupada en la localidad de Calp.
Finalmente, el pasado 8 de septiembre, los agentes procedieron a la detención de los cinco delincuentes. Esto fue posible después de tener conocimiento que la banda iba a abandonar la vivienda ocupada con la intención de trasladarse a otra provincia.
A los delincuentes se les sustrajo 2.000 euros en efectivo, llaves maestras, llaves magnéticas falsas, diversas herramientas y una tarjeta bancaria que había sido sustraída a una de las víctimas. Además, los agentes pudieron incautar el vehículo a motor que utilizaban para cometer los delitos.
A pesar de la detención de todos los miembros de la banda, la Guardia Civil no da por concluidas las investigaciones, por lo que no se descarta que puedan aparecer nuevos perjudicados.
