Su nombre es Ignacia P. Devesa y denuncia la falta de cumplimiento del Circuito Rápido Oncológico (CRO) (respaldada por Amunt Contra el Cáncer) en el departamento de salud de Dénia ante la sospecha de padecer un tumor. Seis meses ha tardado en conseguir una cita con el oncólogo tras varias demoras y pérdidas de papeleo.
La odisea de Ignacia comenzó cuando empezó a sufrir varias rectorragias y tras 20 días de espera pudo conseguir una cita con el 4 de enero de este año con su médico de familia, el cual solicitó una colonoscopia, ante la no respuesta a esa solicitud por parte de la paciente. El 26 de febrero registró una hoja de reclamaciones en el SAIP, amparándose en el cumplimiento del CRO de la Conselleria de Sanidad.
Su sorpresa fue cuando el 3 de marzo la llamaron para la prueba de anestesia, pero el 22 de marzo el gerente del Hospital de Dénia, D. José Félix Quintero Moreno, contesta a su hoja de reclamación (del 26 de marzo) en la cual le dice que ya se me había realizado la colonoscopia. La paciente continuaba sufriendo rectorragias. El 30 de abril registró otra hoja de reclamación, amparándose en el mismo cumplimiento del CRO.
El 14 de mayo finalmente la citan para realización de la colonoscopia, en la cual le toman una muestra para biopsia, porque el pólipo que veían podía ser sospecho de que no fuera benigno. Le informaron que en 10 días la llamarían para decirme el resultado de la biopsia.
Sin embargo, el resultado fue comunicado de otra forma: el 27 de mayo Ignacia recibe una llamada para decirle que tenía cita en la consulta de digestivo, el día 30 un TAC y que el día 10 de junio una RNM. Ante este desconcierto al no saber qué pasaba, la paciente preguntó qué es lo que ocurría y por teléfono le informaron de que tenía un tumor.
«El día 30 de mayo cuando me realizan el TAC, me adelantan la cita de la RNM al 5 de Junio, y cuál es
mi sorpresa, que llamo para confirmar la cita del día 11 junio de digestivo y me dicen que he desaparecido del sistema, y que tengo que volver a mi médico de familia para que me vuelva a remitir al Hospital», expone Ignacia.
Sin embargo, acudió al día siguiente al Hospital, para confirmar lo que le habían comunicado y le dan la noticia de que hay solicitada una cita con cirugía y que la agenda estaba cerrada hasta julio. «Fuimos al SAIP y no pudieron decirme ni adelantarme ninguna de las citas que me habían dado por teléfono», explica.
Finalmente, a la semana siguiente, le llaman y le dan cita para el 20 de Junio con el esperado oncólogo. «¿Después de todo esto, piensan ustedes que el CRO funciona en este departamento de salud? Mi manifiesto es para que se tomen las medidas oportunas para que se implante el CRO», denuncia la paciente.
Este caso solo es la punta del iceberg de lo que está pasando con enfermos oncológicos que vienenna manifestarnos sus quejas y malestar por el incuplimiento de el CRO, lo cual redunda en el agravamiento de su enfermedad, puesto que el un diagnóstico precoz es sinónimo de una mejor tespuesta en su tratamiento,