Moraira celebró durante el pasado fin de semana dos de sus días grandes. El sábado, el día de la Virgen de los Desamparados, festeros y festeras junto a los vecinos de la localidad llevaron a cabo la procesión en honor a su patrona en una tarde llena de emoción.
Al finalizarla, un gran castillo de fuegos artificiales, como colofón de la gran jornada, les esperaba en la explanada del Castillo de Moraira antes de la fiesta nocturna reglamentaria.
Aunque el fin de semana de devoción siguió el domingo, en uno de los eventos más multitudinarios y esperados de las fiestas. Moraira, como pueblo marinero, aúna en sus festejos la celebración de la Virgen del Carmen con una procesión por tierra y mar que nunca defrauda.
Este año, además, se estrenaba la marcha Verge Marinera, compuesta por Rafa Soriano y dedicada expresamente a la Cofradía de Pescadores de Moraira. Se vivieron entonces momentos de gran ilusión.
Pero, si por algo destaca este acto, es por la procesión que los pescadores dedican a su patrona por la costa de Moraria agrupándose con sus barcos y desfilando con la imagen por las aguas tranquilas de la localidad al anochecer. Una velada que finalizó de nuevo con un castillo de fuegos, esta vez acuático.