La comarca es una tierra de contrastes. La costa es uno de los destinos más conocidos y elegidos durante la época estival, pero el interior de la Marina ofrece tantos tesoros como pueblos y valles la conforman. En definitiva, se trata de una zona rica en cultura, patrimonio y naturaleza perfecta para disfrutar sea la estación del año que sea.
Primavera en la Marina Alta
Sin duda una de las estaciones más esperadas del año. Tras los meses más fríos, el equinoccio de primavera marca el pistoletazo de salida a las ganas de disfrutar y vivir, un poco más, experiencias al aire libre.
El cambio de horario que alarga la luz natural, el florecimiento de los almendros, cerezos y naranjos y otras especies de la comarca o las rutas de senderismo bajo el sol invitan a reactivar de nuevo las agendas y los planes de habitantes y visitantes.
Cada municipio de la Marina ofrece infinidad de oportunidades que visitar y una gastronomía diversa con la que deleitarse sea cual sea el destino final de la excursión.
Estos son cinco de los pueblos con encanto de la comarca en los que disfrutar de todos estos placeres un día de primavera:
5. Xaló
La estación primaveral en Xaló invita a conocer y recorrer cada rincón de sus campos, sobre todo, sus viñedos. La mistela, famoso licor autóctono de la zona, puede ser la excusa ideal para iniciar una ruta que permita a sus visitantes degustar las especialidades en las bodegas del municipio.
Y, ¿qué mejor para adentrarse en esta apasionante aventura que una ruta por los riuraus de Xaló? Este itinerario recorre alrededor de 10 construcciones con estas características y que la Marina Alta conoce tan bien. Además de diversos miradores, viñas, balsas o pozos, entre otros elementos.
4. L'Atzúbia
Tras pasar Pego y por la carretera que une a la Marina con Alcoi, el primer pueblo que se encuentra es l'Atzúbia. A las puertas de la Vall de Gallinera, el municipio goza de un entorno encantador, entre montañas, y con un casco histórico de origen musulmán.
Gran prueba de esos orígenes es el Castell de Forna, el cual pertenece a l'Atzúbia desde la anexión del núcleo poblacional de Forna a la actual localidad en 1911. La fortificación se encuentra en lo alto de una colina y se calcula que la torre más antigua pertenece al siglo XIII. En la base se ubica un espacio de estacionamiento y, más abajo, un local de restauración en el que empezar o finalizar la experiencia.
3. Vall de Gallinera
Conocida por la ruta de los ocho pueblos, la Vall de Gallinera está conformada por todos esos núcleos poblacionales con una distancia de 14 km, aproximadamente. Pasear por sus calles y senderos es todo un deleite, sobre todo al seguir el itinerario que conduce por sus numerosas fuentes y lavaderos.
Pero, otra de las innumerables particularidades de Gallinera es su riqueza natural. El gran tesoro de la zona son los abundantes campos de cerezos que la conforman y la rodean. Todo un espectáculo ideal para recorrer en primavera.
2. Parcent
De nuevo en la Vall de Pop, Parcent es el siguiente pueblo recomendado. Pese a sus reducidas dimensiones, la localidad alberga algunas rutas de, casi, obligado conocimiento. Una de las más populares es la ruta circular por la Serra del Carrascar, o PR-CV 158. 15 km para recorrer y en cuya cima se puede admirar la belleza de toda la Marina Alta y también de la Marina Baixa.
El próximo itinerario propuesto es la Ruta de les Fonts. Otro recorrido por las fuentes y lavaderos tan característicos de la comarca. Además de la ineludible subida a la Nevera, donde se encuentra la «Casa de la Neu». Una construcción en la que tiempo atrás se almacenaba la nieve para conservar diversos alimentos y elementos que la requerían para su conservación.
1. Alcalalí
Alcalalí alberga una riqueza patrimonial y paisajística única en la Marina Alta. Desde la Torre Medieval se puede admirar tanto las montañas como el casco urbano y otras de las recomendaciones de la lista, como Xaló y Parcent. La edificación, datada de finales del siglo XIV y principios del XV, fue construida para la vigilancia y el refugio de la época.
Y, si lo que el cuerpo pide es otra ruta, la de «Caminos de piedra y agua» es la que transcurre a lo largo del río Gorgos. Desde Alcalalí conduce por varios municipios de la Vall de Pop a través de los que descubrir otra parte de la arquitectura hidráulica clásica de la comarca.
Descubre la Marina Alta a través de todas estas recomendaciones y empieza a planificar ya tus próximos destinos aprovechando el buen tiempo.
Pues creo que Lliber también selo merece,si no vengn a visitarlo y verán,lo digo sin ofender a nadie.
Os faltó agregar La Vall dr Laguar, con los hermosos frutales en flor, cerezos, almendros, ciruelos y unas vistas de ensueño. No lo olvideis para una siguiente información. 😉🤗