OPINIÓN | Luisina Daives, psicóloga de Amadem
Desde 2016 se celebra el primer miércoles de mayo el Día Mundial de la Salud Mental Materna, una decisión tan importante, que lleva a una mujer a cambiar su vida para siempre. El objetivo de este día mundial, es sensibilizar acerca de los problemas y trastornos de Salud Mental de este momento tan especial y complejo en la vida de una mujer que decide ser madre; tanto, durante el embarazo, parto y postparto.
En la etapa del embarazo, las mujeres experimentan grandes cambios físicos, hormonales y emocionales, los cuales, en caso de no recibir la atención, los cuidados y autocuidados adecuados, pueden impactar en su salud física y mental. Los trastornos que pueden aparecer, irán desde una depresión perinatal, ansiedad, trastorno obsesivo-compulsivo, trastorno bipolar, hasta una psicosis posparto.
Las principales causas y factores que afectan la Salud Mental materna serán: fatiga y cansancio, falta de sueño, cambios hormonales, idealización de la maternidad, experiencias traumáticas pasadas, conflictos familiares, antecedentes familiares o personales de trastornos mentales, o haber perdido ya un hijo. Las recomendaciones para el cuidado de la Salud Mental materna, aunque siempre las digo para todas las personas, será alimentarse de una manera sana y balanceada, caminar o hacer ejercicios de bajo impacto, dormir bien y tomar siestas cuando el bebé duerme, evitar estar sola durante mucho tiempo en la casa familiar, solicitar apoyo a la pareja, familia, amigos o incluso a algún grupo para madres primerizas.
Es muy importante la buena gestión del estrés, la ansiedad y la angustia durante la etapa perinatal (y de nuevo, para todas las personas) y, en el caso de necesitarlo, buscar ayuda médica y terapéutica para tratar y prevenir. Desafortunadamente, muchas madres y familias no llegan a recibir la atención sanitaria adecuada. Y, el estigma en torno a los problemas de Salud Mental sigue siendo un obstáculo que afecta especialmente a este grupo. Aquí la psicología tiene un papel fundamental, ya que proporciona herramientas y estrategias que han demostrado ser eficaces, para desarrollar habilidades y recursos para sobrellevar el estrés y la ansiedad que puede suponer el nacimiento de un hijo/a.