La Plataforma Salvem la Vall entrega carbón en Reyes al Ayuntamiento de Llíber por el avance del PAI Medina
La Plataforma Salvem la Vall llevó a cabo una protesta frente al Ayuntamiento de Llíber en vísperas del día de Reyes entregando sacos de carbón como medida de rechazo al PAI Medina Llíber que pretende construir 488 viviendas en el paraje natural de la montaña Llarga.
Según la plataforma, la entrega de carbón responde a cinco puntos principales. En primer lugar, denuncian que el proyecto, al que califican de «pelotazo», se está llevando a cabo utilizando una declaración de impacto ambiental caducada desde 1990, debido a la imposibilidad legal de obtener una actualizada por la magnitud desproporcionada del proyecto.
En segundo lugar, argumentan que este macroproyecto destruirá el entorno ambiental de la montaña Llarga, un territorio forestal estratégico de gran valor que conecta con la sierra de Bèrnia, siendo una puerta de entrada a la Vall de Pop.
La Plataforma también alerta sobre el impacto en los recursos hídricos, indicando que el proyecto comprometerá el suministro de agua para toda la Vall, ya que el proyecto no cuenta con concesiones hídricas, a pesar de requerirlas, excediendo ampliamente las concesiones legales actuales en Llíber.
Además, señalan que este tipo de «especulación urbanística» vinculada a urbanizaciones desmedidas empobrece la renta per cápita de la región e impulsa un modelo turístico de bajo rendimiento económico y alto impacto ambiental, lo que resta valor al potencial turístico y económico de la Vall.
Por último, advierten sobre la masificación estacional que acarrearía este macroproyecto, afectando la calidad de los servicios para los habitantes de la Vall de Pop y generando problemas de mantenimiento a largo plazo para los municipios, cargando estos gastos sobre la ciudadanía.
Esta acción de protesta de la Plataforma se suma a un velatorio ciudadano realizado recientemente frente a la constructora del macroproyecto. Salvem la Vall anuncia más acciones para enero y una gran manifestación en febrero, destacando que «las protestas apenas comienzan». Además, planean unirse a acciones legales lideradas por otros municipios e instituciones, contando con el respaldo de colectivos valencianos.