Esta mañana de domingo, la Marina Alta ha amanecido literalmente engullida por una niebla densa que impide ver más allá de unos pocos metros. El fenómeno ha envuelto paisajes y municipios, desafiando la visión de transeúntes y conductores por igual.
Desde las primeras horas de la mañana, la niebla se ha adueñado de buena parte de la comarca, envolviéndola en un velo blanco que reducía la distancia a unos pocos metros. Acostumbrados a los cálidos amaneceres ya durante todo el año, los vecinos y vecinas se han levantado sumidos en una atmósfera inusualmente opaca y misteriosa.
En Xàbia, por ejemplo, se observa como el Montgó y sus alrededores todavía se encuentran bajo el cielo grisáceo. Ondara, Beniarbeig, El Verger, Dénia y Els Poblets todavía siguen sellados.
Se espera que la capa de niebla vaya disipándose en las próximas horas, devolviendo a las calles y carreteras la visibilidad.