El paso de las ballenas rorcuales por la costa de la Marina Alta es un fenómeno en fase de estudio. El proyecto Cabo Rorcual, que lleva a cabo el Instituto de Investigación para la Gestión Integrada de Zonas Costeras de la UPV, pretende mejorar el conocimiento sobre los movimientos y las rutas migratorias de estas ballenas. Pero, cualquiera que quiera admirar el precioso fenómeno puede hacerlo tranquilamente desde tierra, aconseja el Oceanogràfic de València.
El espectáculo que dejó el pasado fin de semana el paso de estos cetáceos por el litoral de la comarca ha puesto en evidencia el desconocimiento de las embarcaciones de recreo hacia la legislación que protege a las ballenas. O, más bien, el mal comportamiento o poco respeto hacia ellas.
Tal como informa Ecologistes en Acció Marina Alta y varios medios de comunicación, el sábado 26 de junio un grupo de embarcaciones persiguieron a los animales "como si de una diversión o un espectáculo de consumo se tratase y sin pensar en las consecuencias que un comportamiento de acoso puede provocar".
Sucedió en la cara norte del Cap Prim de Xàbia. "La situación como mínimo fue peligrosa y estresante para las ballenas", apunta el grupo ecologista. Este hecho puso de relieve la gran popularidad que está adquiriendo el paso de rorcuales por la costa comarcal y que en otras partes del planeta se usa como reclamo turístico.
Sin embargo, Ecologistes también ha sacado a la luz las imágenes de un pez luna muerto con marcas de hélices y signos evidentes de que el animal había sido embestido por una embarcación a motor. Unos buzos lo encontraron en la misma localización donde tuvo lugar la persecución de ballenas, solo que un día antes.
Tras el grave incidente de persecución que sufrieron los rorcuales el pasado sábado, la consellera de de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, ha encargado al Servicio de Vigilancia Marina el control de las embarcaciones, como modo de garantizar la protección de los animales y asegurar un comportamiento responsable hacia ellos.
Desde el Oceanogràfic de València recuerdan en sus redes sociales tres aspectos esenciales del avistamiento de ballenas protegidas: