El Partido Popular de Calp se encuentra sumido en una crisis interna desde que se anunciara la intención de proponer al actual diputado César Sánchez como candidato a la alcaldía del municipio para las próximas elecciones municipales. Una decisión que se tomó sin informar a la actual alcaldesa, Ana Sala, y que ha provocado numerosas reacciones desde entonces.
Tras la noticia, Sala arremetió contra el partido calificando la decisión de traición, a la vez que usaba esta palabra para referirse a algunos compañeros de su partido. Más tarde, el PP calpino convocó una asamblea extraordinaria donde aparecieron Sánchez y Sala juntos para explicar la situación que se vivía entre sus filas.
Sánchez, por su parte, explicó que su regreso se debía a la falta de cohesión dentro del partido en la actualidad, presentándose como la mejor opción unificadora en estos momentos. Sin embargo, en el encuentro, a pesar de ser multitudinario, se echó en falta a uno de los ediles del PP en el Ayuntamiento, Domingo Sánchez.
Ahora, durante este fin de semana, el edil ha comunicado en sus redes sociales que tanto él como su compañera Hilde Backaert habían sido cesados como concejales en todas sus competencias y responsabilidades, además de retirar sus sueldos.
«Ha sido una decisión unilateral, que no comparto ni entiendo, una decisión que no es buena para la estabilidad del PP y de nuestro pueblo a falta de 5 meses para las elecciones municipales y que comunico con enorme tristeza» ha afirmado el ahora exconcejal.
Además, en su comunicado ha dado todo su apoyo al partido en todo su conjunto, desde Alberto Núñez Feijóo como posible próximo «presidente de todos los españoles» hasta Carlos Mazón en su candidatura como President de la Generalitat y César Sánchez como candidato a la alcaldía de Calp.