Adentrarse en Senija es respirar serenidad y costumbre. El pequeño pueblo de la Vall de Pop, con 623 habitantes, reúne todas las características del entorno rural para aquellos que buscan la más pura tranquilidad. Pero la localidad, desde 2017, ofrece otro atractivo que merece la pena visitar.
El arte y la historia cobran vida entre sus calles gracias al Museu Obert de Senija, un escaparate de arte al aire libre con la suficiente firmeza y recorrido para ser un auténtico tesoro cultural. Cada mural de arte urbano captura la esencia de la vida de este pueblo de la Marina Alta, con rincones de verdadera inspiración.
El MOS surgió de la idea de emplear el arte como un reclamo turístico, una forma peculiar a la par que grandiosa de hacer valer el patrimonio cultural del pueblo de una forma diferente, actual y llamativa. Una iniciativa que puede atraer a todo tipo de público, desde mayores a pequeños, y que renueva y embellece el ambiente con singularidad.
Lo mejor para descubrirlo es perderse entre sus calles. En un paseo descubrir las más de veinte obras expuestas, a las que en 2022 se sumaron cuatro esculturas de hierro que retratan la historia de Senija.
Pero basta de palabras. Lo mejor para transmitirte todo lo que te hemos contado es que lo veas con tus propios ojos. Pero, sobre todo, que te dejes caer por Senija en la próxima y sexta edición del MOS que, si sigue la tendencia del pasado año, se llevará a cabo en septiembre.
Hay muchos más de cuando yo estaba trabajando ai