Esta semana han comenzado las obras para la construcción del nuevo cruce del Hostal de Sant Jaume, situado entre los puntos kilométricos 206,5 y 209 de la carretera N-332, dentro del término municipal de Oliva, y la carretera CV-678 que conecta con Pego.
Los trabajos, adjudicados a la empresa valenciana Torrescámara, están financiados por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, con un presupuesto total de 8,3 millones de euros (IVA incluido). El objetivo principal del proyecto es eliminar uno de los puntos negros de tráfico más peligrosos de la zona, mejorando la seguridad y la fluidez de la circulación.
Según el proyecto, la actuación eliminará la actual intersección entre ambas carreteras y prevé la construcción de caminos laterales de servicio a ambos lados, con una longitud total de dos kilómetros, que evitarán los accesos directos y peligrosos. Además, se construirá un paso elevado sobre la N-332 que permitirá el acceso a la carretera de la Marjal.
Las obras fueron licitadas en noviembre de 2023 y adjudicadas en julio de 2024, tras un largo proceso técnico y administrativo.
La alcaldesa de Oliva, Yolanda Pastor, ha celebrado el inicio de las obras y ha destacado su importancia para la ciudad: «Estamos muy satisfechos por el comienzo de este proyecto, ya que se trata de una actuación muy necesaria y que se ha alargado demasiado en el tiempo, porque ha sufrido muchas modificaciones».
Pastor también ha querido reconocer el trabajo conjunto de las diferentes corporaciones municipales: «Nosotros hemos dado los últimos pasos, como la firma de las actas previas de ocupación de los terrenos, que tuvo lugar en junio de 2024, pero las corporaciones que nos precedieron también trabajaron intensamente para hacerlo posible. Con esto quiero decir que cuando los distintos gobiernos van de la mano, los proyectos de ciudad salen adelante. Lo vimos con la salida sur de la AP-7 y la carretera Oliva-Piles, y ahora lo veremos también con el Hostal de Sant Jaume».
