El consistorio de Pego ha hecho una solicitud dirigida a la Diputación de Alicante, en la que demandan una modificación en los criterios empleados para la adjudicación de proyectos de construcción. La petición busca que las decisiones de adjudicación no se limiten únicamente al precio ofrecido por las empresas concursantes, sino que también se consideren aspectos adicionales como la implementación de un plan de igualdad, certificaciones de buenas prácticas y de calidad, así como la inclusión de personal con diversidad funcional en la plantilla.
La concejal de Urbanismo, Laura Castellà, ha enfatizado que en el municipio de Pego ya se aplican este tipo de criterios en los procesos de adjudicación de proyectos. Además, ha destacado la importancia de este enfoque para evitar situaciones como la experimentada en las obras de la calle Sant Miquel, donde los retrasos y parones no justificados han generado molestias significativas entre los residentes.
En una reunión mantenida ayer entre la edil, el alcalde Enrique Moll y técnicos de la Diputación de Alicante, se plantearon estas demandas junto con la urgencia de acelerar los trabajos en la calle Sant Miquel. Los técnicos, sin embargo, señalaron que el panorama futuro de las obras no es alentador y ofrecieron dos posibles vías de actuación: revocar la adjudicación a la empresa, lo que implicaría reiniciar todo el proceso, o presionar a la empresa actual para que acelere sus labores. En ambas situaciones, incidieron, «el proceso de finalización de las obras será largo», según ha informado el consistorio.
El gobierno de Pego también solicitó a los técnicos provinciales que se hagan responsables de reparar los daños ocasionados por las obras en las viviendas de los vecinos, asumiendo todos los costes asociados.
Laura Castellà expresó su pesar por la situación actual de las obras, especialmente por los afectados directos, y subrayó la necesidad de un cambio en el sistema de adjudicación para garantizar la calidad de los trabajos y evitar problemas futuros para la comunidad.
