En Benissa se distinguen diversas zonas costeras. A continuación explicaremos una breve pincelada de cada una de las playas y calas.
Playa La Fustera
Es la playa más conocida del municipio. De arena fina, tiene parque infantil, merenderos, chiringuito, actividades náuticas y acceso para personas con dificultades de movilidad. La playa de la Fustera se enmarca entre salientes rocosos que la y hay vegetación hasta casi primera línea de mar. Los fondos son cristalinos y llenos de la valiosa posidonia oceánica.
Cala Baladrar
La cala del Baladrar es una cala de cantos rodados y poca profundidad. Está rodeada de un bonito paisaje entre acantilados y pinos. Para acceder hay que bajar por unas escaleras. A nivel del mar hay un entrante rocoso que divide la cala en dos secciones: el Baladrar y la Goleta. Hay chiringuito.
La Platgeta de l’Advocat
Lo que más caracteriza a esta cala es su pequeño espigón. Hay una zona de arena protegida de las olas ideal para los niños, las aguas son turquesas y hay chiringuito.
Cala de la Llobella
Es la cala de menos afluencia de gente, debido a su acceso. Es la cala más tranquila y más «salvaje», de cantos rodados y con pinos prácticamente hasta la orilla. Es ideal para el snorkel o el submarinismo.
Cala Pinets
La Cala Pinets es pequeña, de cantos rodados y rocas. A los niños (un poco más mayores) les encantará hacer una excursión hacia la zona Mar morta (Mar muerto) y Roques negres (Rocas negras). Es una cala bastante salvaje y escondida.
Bahía de Les Bassetes
Es la parte más al sur de la costa de Benissa, en el límite con Calp. Tiene aguas tranquilas y poco profundas. Allí está el Club Náutico Les Bassetes y también el acceso al Paseo Ecológico por el sur. Aquí hay una zona protegida como microrreserva de flora.